La historia de Sami, 9 años.

Estas páginas temporalmente fueron traducidas en Systran, contienen ciertamente errores, quiere disculparnos.

Este testimonio se asemeja a llenos de otras historias de valor e impaciencia que padres llevan incansablemente contra el asma de su niño. Se quiere que este testimonio sea un mensaje de esperanza para estos padres para su declaración que una solución es posible, y que sí, una vida sin asma, sin tos, sin sofocación y sin medicación, es posible. Nosotros, tuvimos la prueba. Es para eso que decimos la historia de nuestro hijo, Sami.

Principio de vida difícil


Sami nació el 15 de noviembre de 2000, en Montreal, Quebec en el Canadá. Pesaba 3k200g y medía 47 cm.
El parto era normal, sin ninguna complicación. Pero como se diagnosticó a Sami in-utero con un hydronéphrose a un riñón, era primordial hacer una batería de prueba al nacimiento y ponerle bajo antibiótico para evitar la infección de sangre. Falta de oportunidad, Sami cogió un estreptococo B y se guardaron en cuidado intermedio al hospital durante 3 semanas bajo antibiótico en intravenosa.
Una vez de vuelta a la casa, se debieron guardar los antibióticos 3 meses con pruebas al hospital en el mes para supervisar su riñón. Afortunadamente todo volvió a entrar en el orden a 3 meses de vida y se pudieron detener los antibióticos.
Hacia esta edad allí, Sami comenzó a regurgitar, luego a vomitar varias veces al día. El médico nos tranquilizaba. Eso llega. A la edad de seis meses, los vómitos se empeoran. Sami no guardaba absolutamente ya nada, debilitaba de día en día y perdía hasta 150g al día. Cogía todo lo que pasaba: gastro, gripe, estancia frecuente al hospital, perfusión, antibiótico. Cambio de pediatra, y la saga sigue durante 1 año. Sami terminó por detener abastecerse, a negarse a poner aunque sea en la boca: eso le hacía tanto mal, que decidió dejarse morir de hambre.
Cambio aún de pediatra que, por fin, diagnosticó un reflujo gástrico que se había vuelto severo. Una endoscopia confirmó el oesophagite aguda. Tratamiento durante 1 año con medicación y todo vuelve a entrar en el orden.

Principio del asma: año 2002

Poco después que haya comenzado a vomitar (hacia la edad de 6 meses), una tos apareció, a menudo en plena noche. Una tos ronca, incansable, que duraba de las horas. Por supuesto, los médicos no nos creían y se debió registrar su tos y hacerla escuchar a un médico. Lo dijo que Sami hacía asma. Tenía 1 año y mitad. Ventolin + Flovent por dos semanas y a continuación si es preciso.
Los próximos años han sido marcados por crisis asmáticas por ci por allí y una operación para poner tubos en sus orejas porque hacía otitis a repetición. A indicar que sobre la mesa de operación hizo una crisis asmática con la anestesia.

A4 años, Sami ha hecho una caída en patín de cuchilla. Siendo alérgicos a todos los productos lácteos, sus huesos carecen de calcio. Resultado: doble fractura helicoidal de la tibia derecha. 8 semanas de yeso. En el mismo momento, su asma se empeoró. Frecuentes hospitalizaciones de un día: administración de Ventolin por máscara y cortisona líquida (Prednizone) a tomar por 5 días. Entonces va seguido por un pediatra especializado en asma. El Flovent que no hace ya el efecto deseado, este médico le pone, hacia la edad de 6 años, bajo un nuevo medicamento el Advair (mezcla de Ventolin y de Serevent) como tratamiento de fondo a tardar todo el invierno debido a una dosis al día. Este tratamiento es juicioso prevenir las grandes crisis asmáticas y dar la oportunidad a Sami de pasar un invierno normal.

Desde, Sami toma el Advair todos los inviernos por un período de tiempo de 4 meses. Pero eso no impide hospitalizaciones de un día, de vez en cuando y por supuesto crisis asmáticas esporádicas con administración de Ventolin. El Ventolin se convierte en su mejor amigo: sale nunca sin tener su bomba sobre él. Cuanto más Sami crecía, y más se observaba que las crisis se volvían más largos, más severas, requiriendo dosis de Ventolin más elevadas. Se encontraba eso raro dado que el especialista que lo sigue nos decía que el asma se mejoraba creciendo. En el caso de Sami, es el contrario que pasaba.

Año 2008: agravación del asma

A 8 años, GRANDE crisis asmática: hospitalización de 3 días. Administración del equivalente de 200 dosis de Ventolin y cortisona en píldora y encubre a oxígeno. Sami en saca debilitado, física y psicológicamente, fracasado un mes de escuela y sigue todo el invierno (6 meses) tomando el a Advair debido a dos dosis al día. Se le da por asmático severo.
Desde este episodio, el menor resfriado, el menor esfuerzo, le desencadena una crisis asmática y se deben aumentarle las dosis de Ventolin para poder controlar su crisis.
Sami es un muchacho muy deportivo. Adora cualquier deporte. A pesar de su asma, nunca se le ha prohibido hacer aunque sea y se le dejaba la posibilidad de administrar sus crisis asmáticas y se tiene constantemente sobre él su bomba de Ventolin. Pero se veía que su estado de salud comenzaba a minarle el moral a veces ya hacía lo que quería.

La campana de alarma: Año 2009

Principio de sus 9 años: Sami coge un virus del resfriado benigno: hospitalización de 3 días con dosis importantes de Ventolin y Cortisona.
Dos meses más tarde, (el mes De diciembre de 2009) mientras que ya estaba bajo el Advair que es juicioso protegerlo y evitar las grandes crisis asmáticas, había vuelto a salir: grande crisis asmática, vuelta al hospital. Hospitalización durante 4 días que falló volver al drama: los médicos que no llegaban a controlar su crisis bajo golpe de máscara de Ventolin y de oxígeno, a del 20 Mn, y cortisona en intravenosa, querían admitirlo a los cuidados intensivos y darle el a Ventolin por intravenosa. Esta práctica es peligrosa porque hay un riesgo de paro cardiaco.
Ya, el corazón de Sami, guardado cama desde hace dos días, pegaba a 160 bajo el efecto de las altas dosis de medicación. Había recibido en fecha más de 350 dosis de Ventolin en las 48.
Todo su cuerpo estaba bajo el choque y Sami tenía espasmos incontrolados. Se era horrorizado. Se decía a los médicos que se había observado que más le daba medicamentos y más su estado se empeoraba. Pero se reían nosotros que nos decía que no era posible y que para el bien de Sami era necesario seguir el protocolo. Y en el caso de la gravedad de la crisis de Sami, hay que un único medio para tratarlo: "aumentar las dosis de medicamentos hasta que eso pase porque si no, Sami corría el riesgo de morir". [nota. aumentar las dosis de medicamentos hasta que eso rompa, ver comentario abajo de página]
Ante esta actitud, y sobre todo según nuestro instinto, se les pidió ya no administrar medicación a Sami el todos 20 Mn, pero esperar que tenga de verdad necesidad. Los médicos no estaban de acuerdo, tuvo bien y se les dijo que se estaba incluso dispuesto a firmar una descarga que les retiraba toda responsabilidad llegara algo a Sami. Terminaron por aceptar.
Las próximas 24 horas fueron intensas… Se desconectó a Sami y cada vez que tenía dificultades a respirar, se intentaba calmarlo, hacerle hacer ejercicios de respiración, hacerlo ir, etc… y dos veces sobre a veces controlaba su crisis. Un día más tarde se había salido del hospital. Los médicos nos decían: "Cómo tiene hace??"

La luz al cabo del túnel

Tras esta última hospitalización, quedaba claro para nosotros que la medicina moderna no podía ya hacer nada para Sami a parte él dar medicamentos con fuertes dosis cada vez más. Se había perdido confianza e incluso eso nos daba miedo.
Se lo decidieron lo volver hacia la medicina alternativa y se estaba dispuesto a intentar todos los métodos posibles. Al cabo de algunas horas de investigación en Internet, se encontró el sitio de "asthma reality". Tras una primera lectura, sobre todo los testimonios de otros padres, las explicaciones del origen del asma nos parecían lógicos. Era la primera vez que alguien se inclinaba para comprender los orígenes del asma y no exactamente tratar los síntomas.
Eso parecía demasiado bonito para ser verdadero. Pero se decidía intentar el muy para intentar ayudar a Sami.
Se contactó con el Sr. Stéphane Dreux, el experto del método Gesret el lo más cerca posible de en casa en Montreal.
Inmediatamente lo tranquilizó y nos dijo que podía ayudarnos. Se fija una primer cita una semana más tarde.
Sami acababa de salir del hospital y estaba aún bajo medicación de Ventolin combinado al Advair además de la cortisona líquida sobre una base diaria.

El tratamiento: una nueva vida que comienza

Primera Sesión: 4 de diciembre de 2009

A partir de la primera sesión, Stéphane lo puso, Sami y nosotros, en confianza y lo explicó, prueba al apoyo, que se desestructuraba a Sami. Tenía una pierna más corta que otro (quizá debida a su fractura?) y el desequilibrio se remontaba a la cuenca, tórax y hombros. Lo explicó que su se bloqueaba segunda y tercera costa del lado derecho. La sesión muy pasó bien. Se desea decir a otros padres, que las sesiones y la manipulación se hacen en suavidad. Sami se reía incluso de vez en cuando.
Tras una primera sesión, Sami respiraba mejor que se lo ha visto desde meses. Incluso Sami nos decía con sus propias palabras "yo se siente mayor, y como si tenía de ventaja de aire". Durante 36 horas no se tenía que poner ninguna dosis de Ventolin y Sami dormía la noche sin ninguna tos, NI desconcierto. Después de, se debió volver a poner, por algunas noches una dosis de Ventolin. Pero los días pasaban sin entorpecen.

Segunda sesión: 11 de diciembre de 2009

En la segunda sesión, se explicó a Stéphane que las noches se debió reiniciar el a Ventolin. Lo dijo que el artículos de cama desempeñaba un gran papel y nos aconsejó comprar para la cama de Sami un colchón y almohada a memoria de forma de la marca Tempur (marca europea) o ZedBed (marca canadiense local). A continuación explicó a Sami cómo era necesario sentarse, ya no poner zapatos de deporte todo el día para evitar que su cuerpo se desestabiliza de nuevo. Cuando Sami ha dormido sobre su nuevo colchón, el asma de las noches detuvo de un día al día siguiente. Era como la magia.

Tercera sesión: 22 de diciembre de 2009

Tras la tercera sesión, exactamente antes de las vacaciones de Navidad, Sami iba cada vez mejor. Se pasaron los más bonitos diez días de nuestra vida con él: ningún asma, ninguna tos, ninguna medicación. Al leer sobre los efectos secundarios del Advair, se decidió decidir este tratamiento de fondo y hacer confianza en el método Gesret. Durante las vacaciones de Navidad, se fue en montaña algunos días para aprovecharse de las alegrías del invierno. Sami se daba a corazón alegría, varias horas al día, en -20 grados Celsiuses (y sí, el famoso invierno canadiense) a distintos deportes: hockey sobre hielo, patines de cuchilla, trineo pequeño, raqueta, esquí de fondo. Eso no detenía. Respiraba la alegría de vivir. ¡No asma y la noche dormía sin ningún desconcierto!! No se había conocido eso desde que ha bebé. Era mágico, el paraíso. Se comenzaba a creer. Se tiene la solución.
Todo se deteriora hacia el 20 de enero, cuando Sami tiene un resfriado y da la vuelta de la escuela con una crisis asmática. Se han debido poner las bombas varias veces esta noche. Él fracasado dos días de escuela y la crisis asmática se empeoran. Se volvía en el mismo punto que la crisis que la llevó al hospital dos meses antes. Pero no había que dar la vuelta al hospital. Se llama a Stéphane que nos da cita dos días más tarde. A la espera de, se lo tiene con el Ventolin y el zumo de nabo + cataplasma de semilla de lino para sus secreciones.
Es la consternación. Se incapacitaba, no se sabía ya que hacer.

Cuarta sesión: 21 de enero de 2010

Stéphane cuestiona a Sami si hubiera hecho una caída recientemente. Sami confirma, había caído a la escuela y su cabeza chocó una pared: la grande abolladura que tenía a la cabeza confirma todo ello. Stéphane nos explica que este choque debió desestructurarlo y que su cuerpo rápidamente reanudó sus malas posiciones. Nos dijo no hacernos y que a recoger todo va en el orden. Esta sesión duró más que 40 Mn. Al salir, Sami respiraba libremente. Stéphane aprendió a Sami dónde se encontraba el punto de paro del asma (bajo la axila izquierda) y él explicó cómo hacer para decidir una crisis asmática.
Dos semanas más tarde, Sami se lleva siempre bien. No hay crisis asmática, no hay Ventolin.

Quinta sesión: 1 de febrero de 2010

Sami se lleva cada vez mejor. Los días pasan bien muy a parte en final de días de escuela: Sami vuelve de nuevo siempre la noche con una crisis asmática ligera que requiere de vez en cuando al Ventolin. Es que agrava, él no incluye porqué exactamente los días de escuela, Sami hacen una crisis asmática mientras que en fin de semana él allí ningún problema a pesar del hecho de que se pasara todo el día de Domingo entusiasmo de hacer el esquí en temperaturas que se acercaban a los -10 grados Celsiuses. Stéphane nos explica que es debido a su cartera que es demasiado pesada. Sami lleva su cartera sobre su espalda para volverse a la escuela a pies. En efecto, su cartera pesaba casi 5 kg
Se le compra un bolso a espalda a ruedas y todo vuelve a entrar en el orden.

Sexta sesión: Marzo de 2010

Sami va cada vez mejor. Pasó su primer invierno sin medicación, a parte el Ventolin que debió tomar algunas veces durante el mes de Enero. El mes de Febrero fue difícil para Sami porque tuvo un accidente en el patio de colegio que se equilibró por una conmoción cerebral. Faltó dos semanas de escuela pero de la parte del asma era la calma plana. Sami no puso el Ventolin de todo el mes de Febrero.
Luego repentina, a mediados de marzo, una grande crisis asmática que apareció durante la noche. Se debieron darle del Ventolin varias veces la noche. No se comprendía que pudo desencadenar tal crisis.
El día siguiente, dirección la clínica. La radio de los pulmones pedida por el médico no revela nada de anormal. Es justo una crisis asmática. Sami debió reanudar cortisona líquida por 3 días. La crisis se ha detenido el día siguiente también repentinamente que comenzó.
Stéphane al examinarlo nos dijo que no se desestructuraba. Esta última crisis sigue siendo un misterio.

En la actualidad, dos meses después de, Sami se eleva a maravilla. No ha afectado el Ventolin desde hace dos meses y reanudó sus actividades deportivas sin ningún problema de respiración ni de desconcierto. Las noches pasan en la calma y se puede decir que estos dos últimos meses, Sami ha tenido una vida normal de un joven muchacho de 9 años.

Espero que nuestro testimonio será un mensaje de esperanza para otros padres que se pegan para que su niño pueda por fin respirar libremente. Una solución existe: hechas confianza al método Gesret.

¡Gracias Jacques!!

Comentarios:

Un grande gracias a los padres de Sami que aceptaron dar prueba y decir el camino que recorrieron con su hijo para sacarlo de su problema respiratorio.

Querría señalar una serie de puntos de detalles que son de una importancia considerable para un experto:

  • Sami comenzó por vomitar (indicación de un ataque del glossopharyngien responsable de los dos reflejos defensivos: tos y vómito, por malposition del primer cervical);
  • se le detectó un RGO (lo que para nosotros indica una desestructuración torácica, el vómito permaneciendo bajo el control del glossopharyngien);
  • aparición de la tos ronca, irregular (mismo tipo que para Téo);


  • 2002: otitis a repetición (implica la 2.o cervical);
  • Crisis "de asma" con una anestesia (un anestesista un día me confirmó que era imposible desencadenar un espasmo de los bronquios durante una anestesia, pero que un espasmo laryngé podía ocurrir. Eso indica una vez más la primer cervical);
  • mentira clásica del médico que dice a los padres que el asma se mejora con la edad;
  • 2008,2009: se constata que las tomas masivas de medicamentos contra el asma carecen de casi ningún validez, él se es necesario pues deducir que no es asma pero un falso asma por espasmo laryngé. La hyper medicación habría podido matar al niño, pero nadie fue implicada por el hecho de que la "medicina" expidió cartas de tratamiento y que los médicos los siguieron a la carta, retirándolos de toda responsabilidad penal. Van a probar que confundieron un espasmo laryngé con un espasmo bronquiales, ya que hacen nunca la diferencia entre una disnea inspiratoria y expiratoria y que unos todos secan irregular incluidos el origen procede de una irritación del glossopharyngien es para ellos el síntoma de un asma severo;
  • ¿"Cómo tienen hace? ", pregunta de los médicos… en mi estancia en Montreal, pude entrevistar con a un especialista médico de urgencias de alto nivel, que quiso asistir a una sesión en Stéphane. Venido con un inhalothérapeute y su material espirométrico, pudo constatar una importante mejora entre la llegada del paciente y el final de la sesión. Le enseñé al punto de paro de la crisis asmática, que hasta hace cesar inmediatamente una crisis con cianosis; le demostramos que incluso fuera de la crisis, mejoraba considerablemente la respiración. ¿Qué creen que haya hecho de lo que vio, constató y aprendió? NADA, absolutamente NADA por temor a que su responsabilidad sea contratada si comenzaba por utilizar el punto de paro al servicio de las urgencias, en vez de seguir inmediatamente el procedimiento médico clásico. ¿"Cómo tienen hace? ", sólo es una simple fórmula de cortesía…;
  • y en final, las recaídas, en mi opinión, se deben a una hipersensibilidad de fibra glossopharyngienne que se irritó desde su nacimiento por una maniobra de extracción en rotación, pueden ser un poco fuertes visto su peso y que al menor malposition del primer cervical redéclenche un espasmo laryngé. El simple hecho de cambiar de artículos de cama, ya de no llevar una cartera sobre un brazo o un hombro, "de liberar los basquettes", etc terminaron por estabilizarlo.