Asma método Gesret : la medicina de las estructuras

Introducción

Someto a la reflexión de los profesionales este nuevo enfoque sobre las patologías inmunológicas (asma, alergias, eccema, psoriasis, etc.).

Para entrar en materia precisaré algunos principios básicos:

  1. La estructura controla la función
    lla estructura del ojo rige la función de la visión; la del oído, la audición; y por supuesto, la estructura torácica, la función respiratoria.
  2. La causa antecede al efecto
    la clave del conocimiento de los efectos sólo puede encontrarse en el conocimiento de las causas . (Ghazâlî: El Tabernáculo de las Luces)
  3. La función dirige la regla del comportamiento
    el desajuste de una función modifica el comportamiento psico-afectivo y relacional del individuo.

De estos tres principios básicos podemos deducir la siguiente conclusión

algunos desajustes estructurales son el origen de patologías funcionales y/o comportamentales

Tomemos al asma como el primer ejemplo para ilustrar este razonamiento

El asma siempre ha sido descrita, y aún lo es, como una respuesta a una agresión exógena del ambiente, sea bajo la forma de una hipersensibilidad alérgica o de problemas psicofisiológicos.
Hasta donde tengo conocimiento, el asma nunca ha sido considerada como una respuesta lógica a un problema de origen endógeno, constituido por informaciones articulares (inconscientes) de tipo "reflejo" o "fantasma", provenientes de subluxaciones condrocostales de los tres primeros segmentos torácicos.

Nervio simpático-parasimpático

En 1926, E Sergent (Francia) consideró la posibilidad de la participación de estos dos sistemas al afirmar :

  • La preponderancia del nervio vago durante una crisis de asma puede deberse a la inhibición momentánea del simpático
  • Por lo tanto, todo el sistema de inervación del aparato respiratorio y especialmente del pulmón está perturbado, y demuestra un desequilibrio a nivel del vago-simpático.

Articulaciones condro-costales

Curiosamente, en la misma época, existió en Alemania un tratamiento quirúrgico (Freund) que consistía en la resección de los cartílagos costales en los pacientes asmáticos, con buenos resultados.

Estos dos caminos quedaron en el olvido debido  al progreso en la elaboración de los fármacos.

Observación de la alineación corporal

La evaluación clínica de un paciente asmático no debe descartar la exploración tradicional de la auscultación y la palpación.
Personalmente sigo fiel a este viejo principio que me ha permitido identificar clínicamente una constante: los asmáticos presentan una ampliación torácica asimétrica en los tres primeros niveles dorsales.
Para confirmar esto de la manera más simple, basta colocar simultáneamente las manos sobre ambos hemitórax al nivel de las articulaciones condro-costales, y pedir al paciente que realice movimientos respiratorios de gran amplitud.

Debajo del pulgar derecho existe una subluxación condrocostal
de la segunda costilla (nótese que el pulgar derecho penetra
más en el cuerpo del paciente)

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El déficit comparativo de la amplitud de uno de los dos hemitórax, observado de frente, nos lleva a explorar y palpar la cara posterior del tórax.
Esto nos confirma lo siguiente: las tres primeras vértebras dorsales tienen reducción de movilidad.
En pocas palabras: es como si a consecuencia de una rotación horaria y segmentaria de la parte alta del tórax alrededor del eje raquídeo y en un plano transversal, uno de los dos hemitórax se encontrara en una posición fija posteriorizada.



Un hemitórax derecho deprimido, claramente visible.
Clásico del asmático.

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En la primera fotografía, antes del tratamiento correctivo, se ve perfectamente el hemitórax derecho deprimido así como anomalías de los diferentes ejes corporales.
Contrariamente a lo que podría esperarse, el paciente estando de pie, manifiesta un falso acortamiento del miembro derecho, Sin embargo acostado (como aparece en la fotografía) manifiesta lo contrario. Asimismo, se percibe la torsión de la pelvis.

En la segunda fotografía, los ejes corporales han vuelto a la normalidad.